Tus manos de seda
Me dijiste eres mi diosa Pensé en el esplendor de las olas Desperdigadas como aureola. Profecías que emergen como latidos De amor donde las estrellas duermen Sueñan sin permiso reclamando querencia Me envuelven recuerdos De días caliente en ríos que cantan ¿Pienso en tocar tus manos con un suspiro? Te siento tan cerca que siento, alientos de aureolas azules Que colman mi anhelo alargo mi brazo Aquí esperándote envuelta en mesura ingenua ansiando el volcán. imagen de la red